Aunque el camino está vinculado con la religión católica, cada uno viene buscando algo diferente: encuentros, redención, retroceso, esperanza, cuestionamiento de la vida, espiritualidad o un desafío deportivo.
Bonitos paisajes, miradores atípicos, descubrimientos turísticos y culturales suelen formar parte del programa de los peregrinos en el que cada uno va a su ritmo.